La icónica lengua roja de los Rolling Stones se ha convertido en uno de los logos más exitosos de la historia de la música y del marketing. La idea original fue del mismísimo Mick Jagger y en 1971 la materializó el joven diseñador John Pasche. La leyenda cuenta que la banda pagó solo 77 dólares por los derechos de la ahora mítica imagen. Lo que en las escuelas de negocios se calificaría como un buen negocio para la banda británica, que hasta ahora ha demostrado tener siempre el mismo tino con la música que con la gestión de su marca. Lo tuvieron cuando en sus inicios decidieron de alimentarse de las influencias del rhythm and blues que tanto había triunfado en Estados Unidos en la década de 1950, como en la decisión de posicionarse públicamente como principal alternativa al ‘fenómeno Beatle’ de los años 60.
Ahora bien, recuperando estos días algunos de los mejores discos de los Stones, su música me recuerda más a un colmillo afilado. Si algo han mantenido los londinenses en sus casi sesenta años de carrera es un nervio casi incontenible imprimido en todas sus canciones. Las baladas sugerentes, las incursiones en el blues, las explosiones de rock and roll… Todas tienen en común esa chulería que les ha caracterizado y ha enamorado a varias generaciones.
Su nuevo lanzamiento, Hackney Diamonds, primer LP con material nuevo desde hace casi veinte años, demuestra que Mick Jagger, Keith Richards y Ronnie Woods mantienen viva esa pulsión por conseguir elaborar melodías frescas y pegadizas. Parece que, a falta del desaparecido Charlie Watts –que aparece en el disco en Live By The Sword y Mess It Up–, los Stones hayan decidido redoblar su apuesta por su sonido más gamberro e incluso juvenil. Aunque esto último pueda parecer paradigmático. De hecho, escuchando temas como Get Close, es inevitable hacerse la pregunta: ¿Cómo puede uno sentirse joven escuchando una canción compuesta e interpretada por señores octogenarios.
En este sentido, vale la pena mencionar la labor del productor Andrew Watt, ganador de un Grammy, que ha conseguido actualizar de alguna manera el sonido de los Stones, adaptándolo a los estándares sonoros de hoy en día. La lista de invitados de excepción brilla con luz propia, con Paul McCartney –sí, un Beatle en un disco de los Stones–, Elton John y Lady Gaga sumándose al proyecto y dejando su pequeña impronta en una de las carreras más legendarias de la historia del rock.
Además, este álbum siempre estará también ligado a la historia del Barça. El club azulgrana vestirá una camiseta especial con el logo de los británicos en el próximo clásico frente al Real Madrid y en otro encuentro del equipo femenino. Una imagen para la historia que demuestra una vez más hasta qué punto los londinenses siempre han sido atrevidos a la hora de promocionar su marca.
🤩 Nossas estrelas do rock 🤘🎸🎶 pic.twitter.com/rVcswzL6XL
— FC Barcelona (@fcbarcelona_br) October 23, 2023
En definitiva, la espera ha valido la pena y los Rolling Stones van a celebrar el sesenta aniversario de su primer álbum habiendo demostrado que continúan plenamente vigentes. Si alguien se esperaba una versión trasnochada y casi autoparódica de sus majestades del rock se equivocaba. Y es que el colmillo de los londinenses continúa más afilado que nunca. Esperemos que podamos disfrutarlo próximamente en una gira.
Imagen de portada © Mark Seliger
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