A veces lo mejor es pararse en seco y escuchar. Por eso de vez en cuando pedimos a lxs músicxs que se expresen y que cuenten su historia por ellxs mismxs. Sin guión, sin preguntas. Simplemente les damos espacio y ellxs hablan. Hoy es el turno de Alba Escalon, quien presenta su tema Caring song. Inspirada en las baladas de Billie Eilish y en las capas de guitarra eléctrica de John Frusciante, esta canción sosegada nace como un agradecimiento a los seres queridos. Con su aire de indie pop, jazzy y Lo-fi y alejándose de la estructura compositiva clásica, consigue envolvernos en una atmosfera muy emocional. Un pedacito de una Alba que ya no hace covers sino que crea su propia magia.
La primera impresión que tiene la gente de mí, es que soy muy risueña. Luego, mi sonrisa se transforma cuando llego al escenario y cierro los ojos. Me adentro en mi burbuja interna donde solo existe el presente, la melancolía, mis letras íntimas y una caja de pañuelos.
Cuando tenía 11 años, mis padres decidieron sacarme del colegio y educarme de manera libre. Desde ese instante, me sentí como una esponja. En ese entonces, vivía en comunidad y podía absorber conocimientos distintos de gente diferente. Me fui adentrando cada vez más en aprender lo que de verdad me llenaba. Grabar vídeos, dibujar, coser, cocinar y lo que nunca pensé que iba a llegar mucho más lejos de mi habitación : la música.
Una navidad, recibí como regalo una guitarra pequeñita de segunda mano, empecé a cantar por mi cuenta y a rasguear algunos acordes que iba viendo por internet. La verdad es que mi técnica cantando era muy mala y parecía que el tiempo se expandía cada vez que mis dedos cambiaban de acordes. Unos años después, todo mejoró y cantar en directo hizo que mi voz y mi proyecto adquiriesen más fuerza.
Mi técnica vocal y de guitarra no han sido trabajadas de manera clásica y teórica, pero en cambio, uso el dinamismo y el poder de la interpretación para que mis temas suenen a Alba. Es algo que fui aprendiendo al ver a Isaac Fernández tocar en directo, que también me inspiró a componer lo mío y dejar de lado los covers. Es Productor, guitarrista y mano derecha en mi proyecto musical y de vida. Normalmente grabamos las canciones en pijama, componemos, creamos vídeos juntos y muchas cosas más. Es mi compañero de aventuras y tiene un gran mérito en todas mis canciones por lo mucho que aporta en ellas.
Cuando creas tus propias canciones, estás entregando una parte de tí al mundo. De alguna manera, desnudándote y mostrándote tal y como eres. Tardé un tiempo en poder amar un tema original más que el de un ídolo. Vivimos comparándonos, tanto creativamente, como físicamente o psicológicamente.
Finalmente, creo que todo recae en ser queridos por los demás, ser aceptados, buscando la perfección inexistente. Para mí, la perfección reside en la belleza que tiene cada uno de poder expresar lo que sale desde dentro sin comparaciones, centrándose en su propia creación sin temor al rechazo. Aunque es más fácil decirlo que hacerlo, yo creo que dejar de sentirnos así, puede convertirse en un trabajo de vida y todo. Este año 2022, irán saliendo los cuatro temas restantes con las sensaciones que me vienen a la cabeza cuando pienso en nuestra sociedad actual o cómo me siento dentro de ella.
Nuestro cerebro odia el esfuerzo y siento que nos estamos acostumbrando a prestar atención o esforzarnos durante menos tiempo cada vez (La corta duración de Tik Tok, Reels de Instagram, anuncios, velocidad de internet, mensajes, etc.). Me da la sensación de que el consumo constante nos lleva a no luchar por los sueños por no saber lo que es el sacrificio, querer resultados rápidos sin errores y dejarlo todo a medias siempre. Pareciera que las redes sociales reflejen que lo más importante es aparentar ser feliz, que si vives un momento y no lo has documentado, parece que no haya existido.
Sea cual sea la vía en la que el espectador se encuentre con este proyecto —ya sea una reflexión escrita por mí, una canción o un vídeo— me gustaría que llegue un pedazo de mi interior. Ya sea inspirador, estar en el presente por un momento o no quedarse indiferente.
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