Quizás empezamos como un juego; como el inocente juego infantil de combinar palabras, melodías, acordes y ritmo en la marmita mágica que invoca y convoca a los espíritus. Y he aquí, que los espíritus se presentaron y comenzaron a bailar con nosotros.
Ahora tiramos a dar.
Vamos a introducirnos por todos y cada uno de los poros de vuestra piel, de vuestros flancos, de vuestras fronteras hasta alcanzar la boca de vuestras entrañas, donde nos agarraremos fuertemente para juntos, todos llorar y reír; llorar y reír de lo abrumadora que es esto de la existencia.
Tiraremos a dar.
Porque con nosotros está Nina Simone, Chet Baker, John Coltrane, Trish Keenan, Jack Kerouak, y la Negra.
Esa es nuestra gente.
MANIFIESTO
1.- FARIO es bipolar, y también no. Oscuridad y Luz. Humildad e Hibris. Silencio y Ruido.
2.- Nos comprometemos a sumergirnos en los vasos comunicantes universales que unen a la humanidad. De lo particular en el artista a lo general en el público, y vice versa.
3.- Invocamos lo poético por su capacidad para señalar los aspectos de lo real, pero también por su capacidad de generar nuevos mundos a través del lenguaje.
4.- Creer en lo primitivo en lo indígena y en su vinculación con la Naturaleza. Lo natural nos implica.
5.- Pérdida y mezcla de los sentidos en un caos sinestésico.
6.- Somos, ante todo, Libertad, en femenino.
7.- Admitimos nuestros magníficos límites: somos pocas, sencillas, de limitado talento, poco tiempo y mucha edad. Dentro de estos límites la libertad es absoluta.
8.- Nos declaramos eminentemente feministas.
9.- Generamos un nuevo cosmos para el cual se requiere una nueva cosmovisión. Ese cosmos tiene exactamente el tamaño de un grano de arena cualquiera en la playa Las Palmeras, de Isla Grande, Colombia.
10.- Será una gran pena cuando FARIO desaparezca. Pero también una gran alegría porque FARIO siempre resurge de sus cenizas en un ciclo infinito.
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